8.1.12

Omar Musa - Seguí tocando

(Australia, 1984 - )


SEGUÍ TOCANDO

Esto es una advertencia para todos.

El mañana no es tu amigo.

El mañana es un visitante para cuya llegada no estás preparado,
cuyos cambios de ánimo no podés anticipar.
No los podés anticipar porque nunca sabés
si va a llegar a tu puerta trayendo flores o un arma,
pero sabés que está todo el tiempo acercándose.

Esto es una advertencia.

Nunca dejes que se consuma el fuego de la lámpara.
Nunca dejes de hacer tu música, incluso si el disco está rayado,
la aguja quebrada y el micrófono desconectado-
seguí tocando.

Incluso cuando estés parado mirando los amenazantes arrecifes,
donde los corales parecen hechos de cuchillas y navajas,
donde el cielo apenas brilla con una luz de carbón
encima de los tiburones y los intermitentes cardúmenes,
donde te movés entre mareas de información
(algunas correctas, otras erróneas, otras sencillamente dementes)
olas de opinión tan potentes que amenazan con ahogarte-
seguí tocando.

Incluso cuando sientas que la amistad es un campo de batalla
donde la brisa está cargada de ego y desconfianza,
donde el afilado sol se oscurece
por un billón de flechas que cantan con la claridad de los pájaros,
donde intercambiamos palabras encendidas en bares y autos recalentados,
donde sentimos que somos lo que queda de los naufragios
de los ideales abandonados-
seguí tocando.

Incluso cuando las respuestas negativas se apilen como pirámides
y te digan que no tenés talento
y que nadie quiere escuchar a un rapero de un pueblo chico de Australia
y que ninguna radio va a poner tu música
y gritás y gritás y nadie te escucha-
seguí tocando.

Pero no estoy seguro de por qué deberíamos,
cuando claramente las posibilidades apuntan en contra nuestra.
Porque sé que el corazón de los hombres
es un pastizal donde florece la oscuridad.

Todo lo que sé es que tengo suerte de estar acá
y que algún día, pronto, este hombre de pasión y lujuria
va a ser polvo y cenizas.
Y que voy a esparcirme de vuelta en el suelo del que salí
y que no quiero que mi último suspiro sea un lamento.
Quiero poder decir que salté del acantilado cuando fue necesario,
que bebí del cáliz cuando me lo pasaron.
Que incluso cuando el disco estaba rayado,
la aguja quebrada y el micrófono desconectado-
seguí tocando.

Esto es un advertencia para todos.
El mañana no es tu amigo.
Así que nunca dejes que el fuego de tu lámpara se consuma.
Porque nunca sabés
cuándo podría terminar hoy.





Versión de Tom Maver

Para leer otras cosas de él:
        ººººººººººººººººººººººººººº

PLAY ON

This is warning to everyone.

Tomorrow is not your friend.

Tomorrow is a visitor whose arrival you cannot prepare for,
whose moodswings you cannot anticipate.
You cannot anticipate because you never know
whether he arrives at your door bearing flowers or a handgun,
but you know that he approaches by the hour.

This is a warning.

Never let the fire in the lamp burn low.
Never stop making your music, even if the record is scratched,
the needle is snapped, and the mic is unplugged-
Play on.

Even when you stand looking out over treacherous reefs,
where the coral is like the blades of razors,
where the sky is glimmering coal above sharks and shimmering shoals,
where you wade through tides of information
(some right, some wrong, some plain insane)
waves of opinion so powerful they threaten to drown you-
Play on.

Even when it feels as if friendship is a battleground
where the breeze is rich with ego and mistrust,
where the burnished sun is blackened
by a billion arrows that sing with the clarity of birds,
where we exchange pugilistic words in bourbon bars and hotted-up cars,
where we feel as if we are the flotsam and jetsam of marooned ideals-
Play on.

Even when the rejection letters stuck up like a pyramid
and they tell you that you have no talent
and that no-one wants to hear an Aussie rapper from a small town
and no radio station will play you
and you scream and scream and nobody hears you-
Play on.

But I’m not sure why we should,
when clearly the odds are stacked against us.
And I know that men’s hearts are pastures that bloom with darkness.

All I know is that I’m lucky to be here
and that someday soon this man of passion and lust
will be ashes and dust.
And that it will sprinkle me back to the soil from which I sprang
and I don’t want my final whisper to be a lament.
I want to say that I leapt from the cliffs when the moment demanded it,
that I sipped from the chalice when it was handed to me.
That even though the record was scratched,
the neddle was snapped,
and the mic was unplugged-
I played on.

This is a warning to everyone.
Tomorrow is not your friend.
So never let the fire in the lamp burn low.
Because you never know
when today might end.




To read more of his poetry:


LinkWithin

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...