Cinco elefantes
caminan
hacia mí.
Cuando la
mañana aún es una helada
lágrima en
el cerebro, vienen
del este,
desde la cola a la trompa,
bailarinas
torpes.
¿Cómo
decirles que toda la noche
rechacé
consuelos? ¡Cinco paraguas, cinco
sauces,
cinco puentes y sus sombras!
Levantan
sus trompas, tomando el cielo
al cual yo
me lanzaría, parten
pedacitos
de cuarzo y de limón. Podría decir
que son
cinco memorias pero
eso sería
injusto. Más bien
son piedritas
buscando refugio en el corazón.
Pasan a mi
lado y siguen. Giro y los sigo
y por horas
no nos cruzamos con nadie.
Versión de Tom Maver
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Five elephants
are walking
towards me.
When
morning is still a frozen
tear in the
brain, they come
from the
east, trunk to tail,
clumsy
ballerinas.
How to tell
them all evening
I refused
consolation? Five umbrellas, five
willows,
five bridges and their shadows!
They lift
their trunks, hooking the sky
I would
rush into, split
pod of
quartz and lemon. I could say
they are
five memories, but
that would
be unfair.
Rather
pebbles seeking refuge in the heart.
They move
past me. I turn and follow,
and for
hours we meet no one else.